Ariana Grande ha estado en el centro de las discusiones sobre la imagen corporal y los estándares de belleza social tras el estreno de Wicked: Part II, apareciendo junto a Cynthia Erivo en la premiere europea de Wicked: For Good en Cineworld London en Leicester Square.Grande ha recibido críticas persistentes y comentarios sobre su aspecto físico y salud, lo que la llevó a advertir públicamente sobre los peligros de opinar sobre los cuerpos ajenos y a recomendar proteger la salud mental bloqueando influencias negativas.La gran visibilidad de celebridades muy delgadas como Grande y Erivo, junto al uso de medicamentos para adelgazar como
Ozempic y
Wegovy, ha generado preocupación por las presiones sociales que fomentan trastornos alimentarios y una imagen distorsionada entre los jóvenes.