La desaceleración económica de China empeoró en octubre debido a la débil demanda del consumidor y a un deterioro del sector inmobiliario.La inversión en activos fijos se contrajo un 1,7% en los primeros diez meses del año, marcando la primera contracción desde 2020, mientras que la producción industrial aumentó un 4,9% en octubre, por debajo de las expectativas.Los analistas advierten que si las tendencias deflacionarias continúan, la prolongada recesión económica de China podría afectar la estabilidad global.