El presidente serbio Aleksandar Vučić negó rotundamente las acusaciones de participación en el turismo de francotiradores "human safari" durante el sitio de Sarajevo entre 1992 y 1996.Estas acusaciones sostienen que turistas occidentales adinerados pagaron entre £70,000 y 100,000 euros para actuar como francotiradores que atacaban indiscriminadamente a civiles desde posiciones serbobosnias.Vučić rechazó todas las acusaciones como desinformación maliciosa durante una conferencia empresarial UK-Western Balkans, mientras continúan las investigaciones internacionales sobre estas expediciones de francotiradores y las atrocidades en tiempo de guerra.