Jakob Forssmed afirmó que una ley sueca que prohíbe la venta recreativa de óxido nitroso ha provocado una reducción significativa en el abuso y los incidentes de salud relacionados.Johanna Nordmark Grass del Poison Information Centre recalcó que los riesgos, incluidos daños nerviosos posiblemente irreversibles, persisten para quienes inhalan grandes cantidades.Las autoridades informaron que el número de llamadas por abuso de óxido nitroso bajó de 1.167 en 2024 a 683 en noviembre de 2025, atribuyendo la disminución a la eficacia de la nueva legislación.