Johan Forssell dice que las deportaciones forzosas a Somalia están dando buenos resultados y que Suecia continuará la cooperación mientras busca acuerdos similares con otros países.Hasta ahora Somalia ha recibido 25 ciudadanos suecos devueltos por la fuerza, 14 de ellos expulsados por delitos, y el gobierno reorientó unos 100 millones de coronas más 5 millones del Ministerio de Justicia a través de la agencia de la ONU IOM para apoyar las operaciones de retorno.Forssell defendió el gasto tras investigaciones de
Ekot y
DN que alegaron que los fondos fueron a "ghost workers", y dijo que hay tolerancia cero con la corrupción pero que no se han encontrado pruebas de irregularidades.