Donald Trump propuso hipotecas a 50 años para ayudar a los compradores primerizos a afrontar pagos más accesibles mediante la extensión del plazo del préstamo.Expertos del sector y republicanos del Congreso dudan de la idea por el aumento de los intereses totales y problemas en la oferta de vivienda.El gobierno canadiense mantiene la cautela con amortizaciones máximas de 25 a 30 años, mientras que estadounidenses se sienten atrapados con las bajas tasas hipotecarias de la pandemia.