Bob Ferguson declaró el estado de emergencia en el estado de Washington debido a que un río atmosférico inusualmente potente provocó condiciones climáticas severas, lluvias torrenciales y casi 5 billones de galones de agua.La potente tormenta ha causado inundaciones generalizadas, deslizamientos de tierra, cierres extensos de carreteras, cortes de energía que afectaron a más de 17.000 clientes y residentes atrapados, lo que llevó a órdenes de evacuación para decenas de miles.La
Guardia Nacional desplegó a cientos de efectivos para rescates en aguas altas, y los meteorólogos del Servicio Meteorológico Nacional continúan advirtiendo sobre condiciones críticas y "inundaciones catastróficas" en áreas afectadas como
Mount Vernon y el condado de Skagit.