Los trabajadores de las antiguas acerías Ilva en Taranto y Génova han iniciado protestas y huelgas tras fracasar las negociaciones entre el gobierno y los sindicatos.Las huelgas incluyen la ocupación de la planta en Taranto exigiendo la revocación del plan industrial y una huelga de 24 horas en Génova contra cambios en las prestaciones por desempleo que ponen en riesgo 1.000 empleos.Los líderes sindicales Armando Palombo y Stefano Bonazzi criticaron el plan de descarbonización del gobierno como una táctica encubierta de cierre de plantas y solicitaron inversiones públicas para asegurar los empleos.