Estallaron enfrentamientos violentos en Bolonia antes de un partido de la EuroLeague entre Virtus Bologna y Maccabi Tel Aviv, destacando tensiones vinculadas a los seguidores de Maccabi en Europa.El gobierno italiano, especialmente el ministro del Interior Matteo Piantedosi, insistió en que el partido se celebrara a pesar de los riesgos de seguridad, con la policía respondiendo a las protestas con cañones de agua y gas lacrimógeno.