Protestas violentas estallaron en Bolonia durante los partidos de EuroLeague entre Virtus Bologna y Maccabi Tel Aviv, con alrededor de 5.000 manifestantes pro-palestinos.La policía respondió con cañones de agua y gas lacrimógeno mientras los manifestantes lanzaban petardos, piedras y garrotes, provocando enfrentamientos que duraron hasta después del partido.Las autoridades italianas mantuvieron el evento bajo alta seguridad a pesar de las solicitudes de reubicación, con reacciones políticas que incluyeron la condena del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y críticas de varios partidos sobre la gestión de la seguridad y la política.