La U.S. Navy informó que el grupo de portaaviones USS Harry S. Truman no estaba completamente preparado para operaciones intensas durante su despliegue, realizando 52 días consecutivos de ataques aéreos contra militantes yemeníes y afrontando varios incidentes graves como fuego amigo, pérdida de jets y una colisión en el mar.El almirante
Jim Kilby remarcó el compromiso de la Marina con el aprendizaje y el impacto financiero de los incidentes se calcula en $164 millones por las pérdidas y daños de los
F-18.