El Servicio Central de Investigación del Crimen Organizado de la Guardia di Finanza ejecutó una orden de confiscación de bienes por €2,2 millones contra Giancarlo Tulliani, quien es buscado por las autoridades. Esta acción se deriva de una investigación judicial que vincula a la familia Tulliani con
Francesco Corallo, conocido como el "rey de las máquinas tragamonedas".
Corallo fue arrestado por cargos que incluyen malversación y lavado de dinero, lo que llevó a la confiscación de activos debido a las discrepancias entre los ingresos declarados de Tulliani y su estilo de vida.