Lily Allen regresó a "Saturday Night Live" con una actuación muy teatral de "Madeline", perteneciente al álbum de ruptura "West End Girl", utilizando la figura escénica de Madeline para procesar su separación de David Harbour y las cambiantes ideas sobre la monogamia y la infidelidad. Dakota Johnson encarnó a la otra mujer en el plató de "Saturday Night Live", recostada tras cortinas translúcidas con un vestido negro de encaje y una bata transparente con pedrería, leyendo mensajes de texto imaginarios que presentan el romance como puramente físico antes de avanzar para dar a Allen un beso en la mejilla y cerrar con "Love and Light, Madeline". La colaboración, en un episodio presentado por Josh O’Connor, ha avivado la conversación de la cultura pop sobre el final del matrimonio de Allen, la imagen de "girls’ girl" de Johnson y su presencia de moda en la franja nocturna, mostrando cómo "West End Girl" convierte una ruptura muy pública en un relato performativo en la televisión generalista.