Tyler Robinson, de 22 años, compareció ante un tribunal de Utah enfrentando cargos de asesinato agravado y una posible pena de muerte por el asesinato en septiembre del activista conservador Charlie Kirk.Los fiscales presentaron pruebas de ADN y confesiones de texto de Robinson, mientras que los abogados defensores, preocupados por la publicidad previa al juicio, solicitaron restricciones sobre la cobertura mediática.La inmensa atención pública incluye comentarios de
Donald Trump, la asunción de
Erika Kirk, la viuda de Kirk, de
Turning Point USA, y la revocación por parte de Estados Unidos de visas a extranjeros que hicieron comentarios despectivos sobre Kirk.