Italia se sumó a Francia para oponerse al pacto comercial UE‑Mercosur, lo que aumenta la posibilidad de que el Consejo Europeo en Bruselas no apruebe el acuerdo tras los esfuerzos de la Comisión Europea por lograr respaldo.Giorgia Meloni y Emmanuel Macron dicen que las salvaguardias agrícolas son insuficientes, miles de agricultores bloquean calles cerca de la cumbre y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva advirtió que podría retirarse si la UE no actúa con rapidez, lo que ha llevado a Ursula von der Leyen a considerar cancelar su viaje a Foz do Iguaçu.Partidarios como Alemania y España, con
Friedrich Merz prometiendo presionar a los socios, piden una aprobación rápida para evitar daños a las relaciones y trastornos para exportadores, pero las reglas de mayoría cualificada y el riesgo de una minoría de bloqueo hacen incierto el desenlace.