Benjamin Dousa anunció que el gobierno sueco está reformando radicalmente su estrategia de ayuda exterior recortando la ayuda a varios países africanos y reasignando fondos a Ucrania.Las embajadas suecas en Bolivia, Liberia y Zimbabue serán cerradas y su ayuda eliminada progresivamente antes del 31 de agosto del próximo año, mientras que la ayuda a Tanzania y Mozambique también disminuirá, reduciendo el presupuesto total de ayuda de Suecia a 53 mil millones de SEK en 2026.Este cambio busca optimizar los esfuerzos de ayuda a pesar de las críticas de organizaciones como
Save the Children, que advierten que los recortes ponen en riesgo servicios esenciales de salud y educación en África y podrían aumentar la influencia de Rusia y China.