Alemania está experimentando un diciembre inusualmente cálido, con temperaturas que alcanzan hasta los 18 grados Celsius, rompiendo numerosos récords de calor para el mes.Los meteorólogos atribuyen este calor prolongado al aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero y esperan que las condiciones templadas persistan hasta el Año Nuevo, con pocas posibilidades de una Navidad blanca.